Se trata de una mezcla de elementos ricos en nutrientes, abundantes en nitrógeno, fósforo y potasio, enriquecidos con oligoelementos. Fortalece el sistema radicular, mejora el desarrollo de ramas, hojas y brotes y previene el retraso en el crecimiento. Con la presencia de oligoelementos (zinc, hierro, cobre, manganeso) en su composición, favorece el crecimiento y el desarrollo. Produce componentes verdes fuertes y saludables, favoreciendo una floración simultánea y robusta para aumentar la productividad.
Favorece la formación de yemas y flores, el cuajado de frutos y mejora la calidad del fruto en hortalizas y frutales (azúcares, proteínas, vitaminas, ácidos orgánicos, compuestos aromáticos, etc.).